El 27 de julio de 2012 se conoció el desenlace de un chaparrón que se veía venir contra el otrora intachable empresario samario Eduardo Dávila Armenta, querido por muchos y enemigo de otros. El juzgado primero especializado de Medellín condenó a 34 años de prisión al exdirectivo del Unión Magdale