Los 'perros' de la Alcaldía de Santa Marta

Dicen que ‘perro que ladra no muerde’, y pal blog que les traigo hoy creo que no habría mejor refrán, porque, en la Alcaldía de mi amada Santa Marta, los dirigentes, en un conveniente silencio -sin ladrar ni un poquito- adelantaron un proceso de contratación para la firma de un convenio (cuando pudo ser licitación) que ahora mismo está en ejecución: nada menos que $1.111.111.111 (Sí, así, con ese poco de unos); mil ciento once millones de pesos, para gastarse en unas esterilizaciones para perros de calle en Santa Marta: le dicen 'convenio' porque, supuestamente, la Alcaldía pon mil millones y el beneficiario el restante. ¡Ajá, ajá!.

Al principio la vaina parece bacana, y cualesquiera de los 4 gatos que me leen dirá: ¡Nojoda Polo! “¿y es que tú no quieres a los perritos de calle o qué? Deja que la Alcaldía se gaste la plata pública en los pobres animalitos”.

¡Y sí!, ese podría ser un buen deber ser, pero cuando uno mira el paso a paso de cómo asignan estos millonarios contratos, uno no puede más que sospechar. Y recuerden, como suelo decir en los blogs: ¡Piensa mal y acertarás!

El proceso para adjudicar este poco de plata nació primero como la convocatoria RE-ESAL-011-2022, del mes de mayo, en la que se hablaba, en un principio, de 8 mil esterilizaciones por mil millones de pesos: la mitad para esterilizar perros (a $120 mil la esterilización) y la otra mitad para los gatos (a $80 mil la esterilización). Sin embargo, esa convocatoria terminó desierta, y no es para menos, si es que la Alcaldía pretendía que el proceso se surtiera en 3 días, tiempo imposible para que organización alguna aplicara.

Como la vaina no dio chicle, unos meses después, volvieron a sacar una convocatoria, la RE-ESAL-018-2022, pero esta vez -pillen el dato- aunque tenían el mismo presupuesto de $1.000 millones, como si fuera magia, redujeron a la mitad las esterilizaciones, es decir, que ya no eran 8 mil esterilizaciones, sino 4.100 esterilizaciones para perros y gatos. Pa completar, las joyitas de la Alcaldía aprovecharon la fusión de los ítems en uno solo y dejaron el costo de las esterilizaciones para 'perros y gatos' a un precio únitario de $120 mil, cuando la de los gatos debía costar $80 mil. ¡Si van pillando la jugarreta embolatadora!

Pero, además, una vaina rarísima, y es que si uno compara la convocatoria de mayo (la desierta) con la que finalmente se adjudicó, salen otras rarezas: más de 2 toneladas de concentrado para perros, que antes se cotizó a 10 millones de pesos, ahora en la nueva convocatoria costaba 14.5 millones de pesos; unos collares que antes no se contemplaron, repentinamente aparecían ahora en el nuevo presupuesto por valor de 53 millones de pesos.

Pa que ustedes se hagan una idea, pese a que en el nuevo proyecto disminuyó las esterilizaciones a la mitad, el recurso humano para hacer los procedimientos aumentó al punto de que se contempló pagar $72 millones de pesos para el personal que iba a esterilizar en apenas 4 meses. ¿Para qué pagar más personal si ahora se iban a hacer menos esterilizaciones? ¡La mitad, para ser exactos!

De maricadita en maricadita se fue justificando el billete: que la papelería por $12 millones de pesos, que dizque comprar un botiquín de medicamentos (quién sabe qué medicamentos) por $4 millones, que hacer talleres de formación por 11 millones de pesos. ¡Nojoda! Hasta casi un millón de pesos en gel antibacterial, con eso les digo todo.

Si no me creen, miren ustedes mismos los presupuestos (el desierto y el que adjudicaron pocos meses después) y miren las diferencias en los precios.  

Clic aquí para ver el presupuesto del contrato desierto

Clic aquí para ver el presupuesto que adjudicaron poco después

Pa completar el hedor a negociado en este millonario contrato, resulta que, para hacer el análisis del sector, la Alcaldía incluyó 3 cotizaciones, que, entendería la Ley, debereían ser empresas distintas, pero, vean ustedes la casualidad, que dos de las tres-con las que supuestamente se definieron los precios del análisis del sector- resultaron tener la misma dirección.

Se trata de las empresas Fundación Cuidado Animal (FUNCUAN), con NIT 900.318.442-3, e identificada legalmente por Néstor Giovanny Montenegro Alfaro, y la empresa Andber Group SAS, identificada con NIT 900610025-6. Y es que fueron tan descarados los oferentes, que al momento de presentar las cotizaciones para la Alcaldía, en el membrete, ambas empresas reportaron tener la misma dirección física: Carrera 46#120-137, en Barranquilla. (Si no me crees, haz clic aquí y mira tú mismo las cotizaciones con las que armaron el contrato).

Sepan los 4 gatos que me leen, que la adjudicación de estos mil milloncitos ya fue entregada a un beneficiario. ¡Vaya coincidencia! Puesto que el ganador del contrato fue una de las 3 empresas que cotizaron para el análisis del sector: La Fundación Cuidado Animal (Funcuan), representada legalmente por Néstor Montenegro Alfaro. ¡Finjan sorpresa!

Todo parece indicar que, en este negocio, los únicos que van a verse beneficiados no son, precisamente, los perros de Santa Marta, sino los perros de la Alcaldía. ¡El que entendió, entendió!

P.D. Cómo será la vaina con el tema de los animales, que las fundaciones que viajan de Bogotá por su propia cuenta a hacer esterilizaciones se ven obligados a decirle a la comunidad que ellos no tienen nada que ver con la Alcaldía, pues resulta que, del ente territorial, cuando se pillan estas campañas, se ponen a regar la bola de que eso por cuenta de ellos. ¡Ay sabroso! ¿Robándose el crédito pa justificar el contrato?

A los privados (desde Bogotá) son a quiénes les toca hacerse cargo del problema TAN tenaz de salud pública de los animales en calle de @SantaMartaDTCH porque desde el gobierno @VirnaJohnson no operativiza nada para ellos.

Acá poniendo la cara @FundAlmaPerruna
Cc @andreanimalidad pic.twitter.com/YEhZ1vOwT0

— Ana María U.  (@Annieuse) September 10, 2022