Parque Taykú y puente de Tucurinca, dos obras que Trino Luna entregó a paramilitares

El exgobernador del Magdalena Trino Luna Correa ha dado de qué hablar por el testimonio que dio ante la Justicia Especial para la Paz, en la que decidió contar sus vínculos con el paramilitarismo y denunciar para que se compulsen copias ante la Fiscalía en contra de por lo menos 25 personas que, según Trino Luna,

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En medio de sus declaraciones, Luna hizo unas revelaciones que resultan totalmente sorpresivas y nuevas para la opinión pública en el Magdalena y que tienen que ver con contratos que adjudicó durante su periodo como gobernador, entre los años 2004 y 2007.

Estas dos obras que mencionó el propio Trino Luna, y que habría entregado directamente para los paramilitares en retribución por haberlo hecho elegir gobernador, son dos: el parque Taykú y el puente de Tucurinca.

Luna narró que su hermano, el fallecido exjefe paramilitar Juan Carlos Luna, alias el Cóndor, era el puente designado para fungir como intermediario en la adjudicación de contratos a través de funcionarios que fueron nombrados directamente en la Secretaría Jurídica para que hicieran pliegos de contratación que se ajustaran ‘como sastre’ a los beneficiarios señalados por el paramilitarismo.

En el caso del parque Taykú, Luna salpicó al arquitecto William Rizcala Muvdi, representante legal de la Unión Temporal Parque Taykú, y quien salió beneficiado en su momento con la adjudicación de este contrato.

Lo llamativo de esta nueva información es que, hasta el momento, la Fiscalía solo había avanzado en el proceso de esta adjudicación como un caso de corrupción, pero nunca se había hecho una relación de este contrato con vínculos con el paramilitarismo.

El Parque Taykú debió ser un moderno centro cultural y de recreación, con zonas verdes, restaurantes, canchas y juegos mecánicos, para lo cual Trino Luna destinó casi 9 mil millones de pesos, dinero que ahora se sabe había sido, en realidad, canalizado para favorecer a los paramilitares. 

Otra de las denominadas ‘para-obras’ adjudicadas por la administración de Trino Luna fue la construcción del puente de Tucurinca. Según el exgobernador, esta adjudicación se hizo porque era "una necesidad de los paramilitares” para que ellos tuvieran cómo mover sus camionetas y sus hombres por esta zona de la jurisdicción de Zona Bananera.

Por esta segunda obra, Trino Luna relacionó al constructor Germán Villanueva.

Luna agregó que la obra tuvo una gestión por parte del ex congresista Luis Vives Lacouture, quien también fue posteriormente condenado por parapolítica, ante el director general del Incoder, Luis Ortiz López, en Bogotá.