Lina Tecillo fue víctima del ‘paseo de la muerte' en Santa Marta: recorrió 3 clínicas

El caso de Lina Esther Tencillo Rada, de tan solo 24 años es un reflejo de la crisis en la atención médica en Colombia, donde los pacientes enfrentan varios traslados entre clínicas y hospitales sin recibir un diagnóstico adecuado. 

La familia de esta joven recorrió al menos tres centros asistenciales sin obtener respuestas claras sobre su estado de salud. 

Seguimiento.co se contactó con su hermana Eliza Ortega, quien manifestó que, ante el dolor y desespero sus padres llevaron a Lina Esther inicialmente a la clínica Cehoca, con un fuerte dolor abdominal, donde le manifestaron que era gastritis y le enviaron unas vitaminas. 

Ante la insistencia del dolor, su madre, Isabel Cristina Ortega la trasladó hasta el Hospital Julio Mendez Barreneche donde en una sala de espera, permaneció más de seis horas antes de ser atendida. 

“Ahí la canalizaron, para colocarle un medicamento calmante, pero ella empeoró. Yo salí corriendo y le dije: mami que tienes y ella me dijo: mami me siento mal. Trato de desplomarse y yo comencé a gritar, auxilio, médico y no me ayudaron porque ya la habían canalizado y le habían puesto medicamento. Después me dijo: mami llévame al baño y en el baño se medicamento desmayó. Yo forme un escándalo, otro enfermo me ayudó a sacarla, un camillero me llevó una camilla y la acostamos como pudimos. Me dijo: mami me siento mal y yo patié, yo chillé, yo insulté, yo busqué y gritaba: auxilio que mi hija está mal”.

“Los médicos se reían, las enfermeras también y que porque estaban en cambio de turno, se reían de mí, pasaban y torcían la boca y decían: ya ella tiene medicamento. Luego llegó un médico y me dijo: cálmese que ya yo la atiendo y a esa hora, a las diez de la noche decidí pedir el retiro voluntario porque nadie le ponía la mano a mi hija” expresó la madre. 

Ante esto, la joven y su madre decidieron regresar hasta su vivienda ubicada en el barrio La Paz. 

Paseo de la Muerte

Allí, según el relato de su madre, le dio de beber un caldo ya que no había comido nada en todo el día. Poco después intentó dormir. 

Sin embargo, a las dos de la madrugada, el dolor volvió más intenso. 

De inmediato la joven fue llevada al puesto de salud local y de ahí conducida hasta la Clínica El Prado debido a las dificultades para su atención.  

“Yo llegué allá con mi hija, me ayudaron a ingresarla, la doctora que estaba de turno me indicó que le harían cuatro análisis y una placa urgente. Le colocaron calmantes, pero ya no volví a ver más a la doctora porque hicieron cambio de turno y mi hija descansó un poquito, pero cuando ella recordó fue con el dolor más intenso. Me dijo llévame al baño y yo la llevé al baño, se me desmayó otra vez. Cuando ella se me desmayó yo pedí auxilio y salió un enfermero y una enfermera, me ayudaron a acostarla y corrí y le dije a una doctora: doctora mi hija se siente mal. La doctora que estaba de turno, no se levantó y me dijo: ya ella se le está colocando medicamento. Y le manifesté que la doctora anterior, le había mandado una placa de urgencia y una ecografía. Y solo me dijo que esperara” manifestó Isabel Cristina.

Frente a esto, la madre denunció que llamó a la doctora de turno en tres oportunidades para que fuese a atender a su hija, pero a pesar de ello, nunca llegó. La atendió otro médico que se encontraba en observación. 

“El médico llegó y con los dedos le apretaba el estómago y ella gritaba. Él me dijo: ella lo que puede tener es una pancreatitis aguda o la vesícula inflamada. Y yo le dije: pero dónde está la ecografía y él me dijo: eso es entre el transcurso del día y se fue sin prestarme la mínima atención. Yo llamé a mi esposo y le dije: me van a matar a la niña, me van a matar a la niña y ellos no se dignaron.  Ahí la dejaron colocándole tramadol y dipirona, eso era lo que le ponían. Yo la llevé a las cuatro de la madrugada y casi a las seis y media de la noche fue que le hicieron la ecografía. El resultado arrojó que tenía la vesícula inflamada” dijo la madre. 

Ante la angustia y la desesperación, la madre insultó a los médicos, les gritaba que iban a dejar morir a su hija y en un momento, una de las mujeres que se encuentra en la recepción le cerró la puerta a la mujer y la dejó afuera. Minutos después, llegó el vigilante y le expresó Isabel que habían realizado junta médica y le dijeron que no la dejarían ingresar por su comportamiento.

Dicho esto, llegó el cambio de turno de la noche y él médico le indicó a Lina que en efecto tenía la vesícula inflamada “pero que no se iba a morir”, indicándole que le colocarían unos medicamentos más fuertes que no lograron aplacar del todo su cuadro clínico. 

Ingreso a UCI

Aunque los familiares confiaban en que la joven saldría pronto de esta situación, sobre las seis de la mañana, en el cambio de turno, les indicaron que debían ingresarla de urgencias hasta la Unidad de Cuidades Intensivos. 

El papá de Linda se negó, denunciando que no le daban información clara sobre el diagnóstico. 

No obstante, el médico de turno, siguió insistiendo que debía ingresarla a UCI; y, en el transcurso de la mañana, una enfermera les había indicado que debían llevar a Lina a sacarle sangre para un procedimiento y el padre, nuevamente, se negó, debido al estado en el que se encontraba la hija. 

Según su relato, él le dijo a la enfermera que Linda “no aguantaba una sacada de sangre porque estaba muy débil”, lo que provocó que posteriormente, dos vigilantes redujeran al padre y lo sacaron del lugar para que la enfermera pudiese sacarle sangre. 

En medio de este caos, y sola, Lina habría muerto.

La confusión, el dolor y las denuncias de presunta negligencia médica, instaron a que la progenitora exigiera que el levantamiento del cadáver fuera hecho por la Fiscalía y no por el personal médico.

Siendo así, la familia de Lina Esther Tencillo se encuentra esperando el tiempo promedio de 20 días para el resultado de Medicina Legal y tener claridad sobre la causa exacta de la muerte de ser querido.

“Eso está en manos de la Fiscalía, creo y espero en Dios, Dios va hacer justifica y que salga lo que es. Porque ellos dijeron que fue muerte natural y eso no fue muerte natural” anunció la madre en medio del llanto y del dolor.