Urgencias cerradas, recursos sin invertir y quejas: así está la salud en Magdalena

El pasado 20 de septiembre, el Hospital San Cristóbal de Ciénaga volvió a ser epicentro de un desencuentro bochornoso entre la gerencia de la institución y contratistas de la misma,  que vienen casi que suplicando, el pago de los meses de sueldo que aún les deben. 

Pese a que 15 días atrás se había sostenido una mesa de trabajo en la que participó el gerente Jairo Romo, en la que se comprometieron a ponerse al día con empleados a los que se les adeudaban hasta seis meses de salario, las promesas fueron incumplidas. 

Lo más preocupante de estas circunstancias, además de la clara vulneración a los derechos laborales, es que la gran mayoría de estos trabajadores siguen prestando sus servicios profesionales, a riesgo de que les cancelen sus contratos. 

Y lo están haciendo sin ningún tipo de garantías: sin seguridad social ni ARL. Profesionales de la salud sin cobertura de salud. 

Pero no es Ciénaga el único municipio que está viviendo una crisis hospitalaria. 

El municipio de Pivijay terminó ‘pagando los platos rotos’ debido a la pelea entre la exgerente Mayra Castro y el gobernador Carlos Caicedo. 

Castro fue una de las gerentes nombradas por el gobernador a inicios de su administración. Sin embargo, pasado poco más de un año, de forma intempestiva, desde el gobierno departamental se notificó la renuncia de la mayoría de los encargados de los hospitales. 

El escándalo vino después, cuando la gerente del hospital de Nueva Granada y de Pivijay, denunciaron que nunca firmaron ninguna carta de renuncia y su firma su falsificada. 

Con esta denuncia, se inició una contienda por el manejo del hospital, que llegó incluso a ser la antesala de nuevas denuncias de corrupción por parte de Mayra Castro contra Carlos Caicedo. 

Mientras se adelantaban las diligencias judiciales, la funcionaria fue separada del cargo y en su lugar, se nombró a Martha Chaparro Trujillo, esposa del secretario del Interior y en ese momento, gobernador encargado, Adolfo Bula.  

Recordamos: ¿Inhabilidad? Gerente del hospital de Pivijay es la esposa del gobernador (e) Adolfo Bula

Una vez el lío judicial llevó a un fallo donde se ordenó reintegrar a Castro, tal como lo denunció la misma ciudadanía, con la salida de la esposa del militante de Fuerza Ciudadana, se habría ‘desvalijado’ el centro hospitalario, mientras que el área de UCI, aunque se construyó, nunca fue dotada con los implementos que prometió el gobierno departamental.  

Tragedias humanas 

Entretanto se desarrollan estas situaciones en los hospitales de Pivijay y Ciénaga, en el municipio de El Banco las quejas por la prestación de los servicios no se detienen. 

En los últimos meses, ya son varios los paros laborales impulsados por parte de funcionarios y contratistas que nuevamente, denuncian que les deben varios meses de sueldo. 

Por si fuera poco, por falta del envío de recursos y de profesionales, la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital La Candelaria fue cerrada. Dejando como única opción tomar los servicios de UCI de una clínica privada. 

Pese a esto, la Secretaría de Salud cerró también el área de UCI de esta institución, por lo que los banqueños que requieran ser atendidos de gravedad, tienen que trasladarse a otros hospitales. Todo un paseo de la muerte. 

Siendo así, es preciso resaltar entonces que la movilización a la que se obligan a los magdalenenses para acceder a servicios de salud no se vive solo en la región sur.  

Recientemente en Puebloviejo la comunidad denunció el cierre del área de partos y laboratorios. Así, sin mayor explicación.  

Y si el cierre representa un desafío para la población que vive en la zona urbana, aún más para las comunidades …