Una veintena de turistas fueron robados en playa cercana a Bahía Concha

Un grupo de turistas nacionales que aprovechaban este Viernes Santo de turismo en Santa Marta no contaron con suerte y fueron abordados por desconocidos que se llevaron sus pertenencias.

Según confirmó la comandante de la Policía Metropolitana de Santa Marta, coronel Sandra Vallejos, los desconocidos aprovecharon la oportunidad puesto que los turistas, acompañados por un guía, abandonaron las pertenencias mientras algunos se bañaban y otros buceaban en las aguas de la playa Bonito Gordo, ubicada en cercanías a Bahía Concha, para cometer el robo. 

De acuerdo a lo reportado por las víctimas, provenientes en su mayoría de Bogotá, estos vieron que unas 4 personas, al parecer autóctonas de la zona, merodeaban por la zona, y repentinamente estas desaparecieron, así como la mayoría de los objetos personales de los turistas, avaluados en unos 7 a 8 millones de pesos. 

Según las autoridades, fue un “factor de oportunidad” que aprovecharon los dueños de lo ajeno para perpetuar este hurto, el cual afecta la tranquilidad de los turistas. 

"Esta es una playa bastante aisalda, que no tiene custodia de la Policía, porque es una playa no visitada por turistas", dijo la oficial, que al mismo tiempo hizo un llamado a los guías turísticos a que lleven a los grupos a lugares que estén bajo vigilancia de las autoridades, así como también que tomen medidas preventivas para evitar que sucedan casos como este. 

Procedimientos irregulares

Seguimiento.co conoció que, al parecer, se presentaron algunas irregularidades que se están investigando con respecto a las operadoras turísticas que llevaron a este grupo de personas a la playa de Bonito Gordo. 

Este medio digital conoció que el grupo de turistas nacionales debió haber sido llevado a a la zona conocida como Waikiki, según pactaron, pero estos fueron llevados a la zona de Bonito Gordo. Además, se investiga la posibilidad de que el guía turístico, identificado como Luis Carlos Torregrosa, hubiera subcontratado los servicios de guía. 

Los turistas hurtados, en consecuencia, fueron a las oficinas del operador turístico para reclamar por el hurto y a exigir la devolución del dinero, entre otra, por haberlos llevado a una playa distinta a la contratada. Al parecer, la empresa turística accedió a devolver el 50% de lo cancelado por los turistas afectados.

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