El día de ayer el Congreso de la República aprobó la Ley Ángel, por la cual se endurecen las penas para maltratadores de animales en Colombia.

Mientras que la ley pasa a sanción presidencial, la falta de conciencia sigue generando casos reprochables en contra de los animales.

Un ejemplo de esto es lo sucedido en Santa Marta.

El día de ayer, la Fundación Por Amor a Rocky denunció a un hombre que desde una bicicleta en movimiento, lanzó una bolso que contenía gatitos recién nacidos dentro.

Trump y Noa son los nombres de dos perros que, al igual que cuatro gatos, permanecen en la terminal de transportes hace más de ocho años. Sin embargo, los días de estas mascotas, que suelen deambular por los pasillos de la terminal, están contados, pues las directivas dieron el plazo máximo de un mes para que sean retirados, a riesgo de ser expulsados.

La situación fue puesta en conocimiento por Eliana Camacho, hija del propietario de uno de los establecimientos, quien desde hace año alimenta a los animalitos para que no mueran de hambre.