Seguiremos trabajando por una Colombia en Paz

Como activista social y defensor de derechos humanos o simplemente como un ciudadano y padre de familia preocupado por una Colombia que no quiero que hereden mis hijos, es necesario alzar mi voz de protesta en contra de la ola de asesinatos de líderes sociales que se han venido presentando en nuestro país y que se han agudizado en los últimos días.

Hasta el día de hoy todavía nos estamos preguntando ¿Quién nos está matando?, ningún grupo armado se ha adjudicado los hechos y el gobierno desde hace varios meses en cabeza del Ministro de Defensa, Luis Carlos Villegas ha planteado hipótesis inconclusas que no han dado con la verdad de estos crímenes. Causa desazón que el gobierno afirme que son hechos aislados o supuestos “líos de faldas”, esas afirmaciones son una ofensa a las víctimas y sus familias, hay un problema de fondo tanto político como social que está afectando la estabilidad del país.

A la fecha han sido asesinados 178 líderes sociales. Entre enero y mayo de este año se han presentado 98 casos y a estos hay que sumarles 24 que ocurrieron entre junio y julio.

De igual forma, es necesario precisar que las cifras anteriormente señaladas comenzaron en aumento desde la firma de los acuerdos de paz entre el gobierno y las FARC, y la mayoría de asesinatos se han presentado en las zonas donde normalmente tenía presencia este grupo armado, territorios que el estado no supo gobernar y que fueron tomados nuevamente por grupos criminales a cargo del narcotráfico, la minería ilegal y delincuencia común.

Mientras tanto, tendremos que esperar que el nuevo gobierno del Presidente electo el Dr. Iván Duque tome medidas en el asunto y logre consolidar la implementación de los acuerdos de paz; ahí está en gran medida la clave para que el terrorismo no tome fuerza nuevamente en nuestro país, además de concretar el proceso de paz con el ELN, y frenar el aumento de cultivos de coca.

Finalmente hago un llamado a toda la ciudadanía para que nos sigamos uniendo en contra de la violencia, a no ser indiferentes con nuestros líderes sociales y activistas de derechos humanos, quienes hemos trabajado de cerca con ellos sabemos de la loable labor que desempeñan en su comunidad y quiero decirle a los violentos que seguiremos trabajando por los menos favorecidos, por las minorías, por defender el medio ambiente, por nuestras comunidades indígenas y no daremos ni un solo paso atrás.

No podemos desfallecer en la consecución de la paz hoy más que nuca necesitamos estar unidos para construir un país que nos brinde garantías a todos.